Son aparatos que se emplean normalmente para mover un fluido de un lugar a otro y superar niveles. De esta forma, sirven, por ejemplo, para sacar agua a la superficie desde un espacio subterráneo. Y están formadas por varias piezas que es muy importante mantener en buen estado. La carcasa de bomba centrífuga, por ejemplo, es un elemento clave que no debes descuidar ni confundir con una simple cubierta.
Carcasa de bomba centrífuga y otras partes importantes
En Inducom contamos con una amplia experiencia en el sector y queremos darte una serie de consejos para conseguir que estos artilugios funcionen de forma óptima. De este modo, una de las cosas más importantes que debes tener en cuenta es que este tipo de aparatos están formados por varias piezas. Estas son algunas de las más importantes:
- Tubería de aspiración: Es la encargada de llevar el fluido a la bomba para que esta pueda impulsarlo hacia un nivel superior.
- Impulsor: También se le conoce como rodete y puede estar fabricado en varios materiales. Se acciona gracias a un motor y es la única parte de la bomba que se mueve. El líquido llega a esta parte del aparato y es ahí donde cambia de dirección de forma brusca para subir un nivel.
- Carcasa: El impulsor o rodete gira dentro de la carcasa, que le sirve de protección. Si esta pieza está dañada, el funcionamiento completo del aparato corre grave peligro.
¿Cómo mantenerla en buen estado?
A la hora de mantener esta última parte del artilugio debes tener en cuenta que está sometida a agentes externos muy importantes como los efectos del agua o las inclemencias del tiempo. Por eso, es muy importante que la revises a menudo. Y que trates de evitar golpes o rasguños que se puedan dar al moverla.