Los motorreductores se componen de un motor eléctrico y de los engranajes (reductor de velocidad) que forman la cadena cinemática, transformándose en el elemento fundamental del ratio de reducción. Los engranajes son ruedas dentadas que pueden ser de metal o plástico, actualmente son diseñadas de otros materiales también. Este elemento, a través del contacto entre sí, se usa para transmitir movimiento. Pueden ser rectos o helicoidales, y se definen por el número de dientes y tamaño.
El objetivo principal de los motorreductores es ayudar a que pase de una velocidad inicial elevada a otra menor, sin que el mecanismo se resienta. Además de este ajuste, un reductor de motor es el sistema encargado de ajustar la potencia mecánica de un sistema.
Existen cinco tipos de motores habitualmente se usan en los motorreductores. Los motores con escobillas o de carbón, son bidireccionales y pueden usarse en CC o CA, tienen un tiempo de vida de unas 3000 horas. También se usan los motores asíncronos, son motores sin escobillas y unidireccionales, por ejemplo los motores trifásicos asíncronos tipo jaula de ardilla, muy usados en la industria metalmecánica, construcción e industria en general.
Por su parte, los motores síncronos o sin escobillas, son unidireccionales o bidireccionales, tienen una velocidad constante si la frecuencia de la red eléctrica es estable. También están los motores sin escobillas, son los motores de CC que funcionan con una electrónica de control o drive y pueden alcanzar altas velocidades, ideales para la industria alimentaria o industria textil. Por último están los motores stepper o motores de pasos de CC y sin escobillas.