Las bombas de vacío de anillo líquido son máquinas rotativas de desplazamiento positivo que suministran vacío para aplicaciones industriales en distintos sectores: química, energía eléctrica. Medio ambiente, procesamiento y envasado de alimentos y bebidas, marina, minería, petróleo y gas, farmacia, pulpa de papel y textil. Utilizan agua u otros líquidos compatibles con el proceso como elemento sellante. Su funcionamiento sencillo y la ausencia de contacto entre piezas hacen de las bombas de vacío de anillo líquido una opción segura y fiable para tratar corrientes de gas sucias y potencialmente peligrosas. Las bombas de anillo líquido se comercializan en diseños de una o dos etapas y pueden configurarse como compresores para mayor versatilidad.
Principio de funcionamiento
El líquido sellante forma un anillo en el interior del cuerpo de la bomba a medida que gira la turbina y crea pequeñas cámaras en las que se atrapa el gas. El eje del rotor es excéntrico con relación al cuerpo y permite que el líquido casi llene y vacíe cada cámara del rotor durante cada revolución, dando lugar a la compresión del gas necesaria para la acción de bombeo. Los orificios de entrada de vacío y salida atmosférica facilitan trayectos para que fluya la mezcla de gas. El calor generado por la compresión del gas se disipa en el líquido sellante y parte del líquido se elimina por el orificio de salida. El gas de escape y la salida de agua residual son independientes de la corriente de gas y se dirigen a la salida de gases y al conducto de retorno a la bomba, respectivamente. El líquido sellante se cambia por un flujo constante de líquido refrigerante.